viernes, 3 de junio de 2016

URUGUAY, UN TERMÓMETRO; ADIÓS A EL PANA



Noé Flores Cortés
Córdoba, Ver.- Llegó la hora de la verdad para la Selección Mexicana y para Juan Carlos Osorio, cuando se enfrenten a su similar de Uruguay en su debut en la Copa América Centenario. Hasta ahora, los números del seleccionado nacional son halagadores, lo mismo para su entrenador Juan Carlos Osorio, inclusive se hizo mucho ruido por el récord de no recibir gol durante muchos minutos. Sin embargo, ahora viene lo serio, lo fuerte, lo difícil y no es que dudemos de la calidad del seleccionado nacional, sino que ahora, los rivales son diferentes y éstos tomarán los partidos de diferente manera. Creo que tenemos una buena selección, hoy en día, ya no nos espantamos ante nadie, nos podemos dar un tiro con cualquiera, más allá de perder, ganar o empatar, le jugamos de tu a tu al más pintado. Sin embargo, no es para echar las campanas al vuelo, pues sólo habrá que recordar que a media semana a pesar de que le ganamos a Chile 1-0 con gol del cumpleañero Javier “Chícharo” Hernández,, el seleccionado nacional se vio mal. Chile nos hizo ver mal durante todo el primer tiempo y si no perdimos el partido, fue porque la defensiva mexicana y el portero Talavera estuvieron atinados, pero nos apedrearon el rancho de lo lindo. Quizá no es para preocuparse, pero si para ocuparse del accionar del seleccionado mexicano, pues Osorio hizo pruebas y es válido, pues había que ver a los jugadores en otras posiciones y se logró el objetivo. Me gustó la idea de que Miguel Layún, el cordobés haya sido capitán del seleccionado nacional, pero no me agrado su accionar en la media cancha, donde por momentos se perdió… México nunca tuvo el control de la media cancha y Chile nos dominó a placer. Layún volvió a lucir en el segundo tiempo, cuando estuvo como defensa lateral; ahí está su lugar o bien como carrilero, pero en el centro no. Osorio hizo ajustes y México se vio mejor, sin deslumbrar a nadie, pero al final, hizo el gol a través del “Chícharo” Hernández y se quedó con el triunfo; podríamos decir que se “borró” todo lo malo que jugó el seleccionado mexicano. Pero ahora será diferente, vamos contra Uruguay, un equipo serio fuerte, con gente que juega en Europa a buen nivel como Luis Suárez con el Barcelona, por lo que será doblemente difícil el partido de este domingo. Esperamos seguir con el paso firme que se ha mostrado, ojalá podamos continuar con cero goles en contra, aunque no lo creo, pero eso es para la estadística, lo que importa ahora es ganar y sobre todo, que México pueda mostrar un estilo definido no solo para esta competencia, sino para otras futuras. Así las cosas, llegó la hora del examen fuerte para la Selección Mexicana, la copa América Centenario en Estados Unidos; esperamos que sigan los buenos resultados.

ADIOS A EL PANA El torero de Tlaxcala se fue de esta vida como él quería hacerlo, aunque desde luego no creo que le hubiera gustado pasar sus últimos días en una cama de hospital; él quería morir en el ruedo, lo dijo varias veces y sí, de la plaza se fue al hospital y de ahí, al cielo. Por ahí alguien dijo que El Pana era de Orizaba, pero no, nació en Tlaxcala y aunque en la zona tuvo buenos amigos, su obligó se quedó en el estado más pequeño de la República Mexicana y si con alguien alternó en esta zona, fue con el también difunto y amigo de él, Elesban Solano. Don Elesban Solano o Cuentacuentos, no sólo fue amigo de El Pana, también en determinado momento lo representó y sobre todo, lo apoyo en su travesía por el mundo del toro, donde el tlaxcalteca fue un tanto incomprendido. Fue incomprendido por los empresarios, no tanto por los aficionados aunque tuvo mucha gente a quien no gustaba su manera de ser; pero en el ruedo se las sabia de todas, todas y mostró siempre una hambre de triunfo como si fuera un novillero. Elesban Solano le apoyo en todo momento de hasta económicamente, lo mismo que hizo en su momento con Amado Luna, éste sí, orizabeño, para que pudiera destacar. El Pana ya se reunió ahora con su amigo Elesban Solano, seguramente estarán disfrutando de las películas, libros y discos donde está plasmada la historia de la tauromaquia de México y del mundo. Se fue El Pana, quizá, sin recibir las oportunidades que merecía en el ruedo, pero las que tuvo, las aprovechó al máximo, aunque para mi gusto, debió retirarse hace 20 años, pero el no tener recursos para poder vivir, lo hizo también, jamás irse del toro, lo cual, al final los taurinos se lo agradecieron… Y por hoy se acabó.

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